Es un libro con 40 ilustraciones de un proyecto personal compartido durante el periodo de confinamiento. Donde estar confinados se ha convertido a veces en sinónimo de estar confitados. Donde 40 en números romanos es XL, como la talla que hemos aumentado algunos en la cuarentena. Estas ilustraciones destilan cotidianidad, empatía, nos animan a sonreír y a reflexionar sobre nuestras emociones, subidas en una montaña rusa, o como parte de una serie de ficción o una distopía.
Pero sobre todo, intentan conservar lo bueno de la vida en diferentes tarros, con el deseo de volverlos a abrir y repartir: las cañas, los amigos, las caricias, los conciertos, la familia, los besos, los viajes y los abrazos. Y de eso trata este proyecto, juntar esas pequeñas y coloridas historias de la cuarentena ilustrada para formar un libro donde se conserven esos momentos compartidos en medio de una pandemia, y sacarlo adelante a través de pequeños gestos.
Un libro solidario con la asociación Pro-Comedor Social de El Ejido.